En la cocina tengo dos botes de cristal , como los que había en las tiendas de caramelos, de esos redonditos con boca ancha que se abren por delante. En uno tengo chupa chups y chuches varias y en el otro sugus. Hace un tiempo compré un bolsón de los grandes y lo llené. Al principio los crios no les hacian mucho caso, pero ultimamente no les dan tregua, sobre todo el pequeño.
Mirando esta tarde el bote he caido en la cuenta de que siempre pasa lo mismo con los sugus. Y pasa en mi casa y en todas las casas del mundo. El bote pierde colores poco a poco hasta quedarse naranja y amarillo, pero con claro predominio del naranja.
Y me pregunto lo mismo que me he preguntado muchas veces, ¿Por qué no venderán bolsas de sugus de un sólo sabor? Yo compraría sólo azules y rojos. Me fastidia tener que comprar cosas que no le gustan a nadie y que sé que van a terminar mal, abandonadas y caducadas.
Igual pongo mañana un anuncio en el tablón de anuncios del trabajo:
Comesugus racista cambia muchísimos naranjas y algún amarillo por azules y rojos.Doy tres naranjas por cada azul y dos por cada rojo.(negociable).
Si esto no me funciona tengo plan B. En el próximo cumpleaños de los niños prepararé un bolsón de sugus de naranja para que los repartan en clase. Todos iguales, para que no discutan. Va a ser la sensación. ¡Estos padres están en todo!, pensarán los profesores...Aunque puede que mis hijos no me lo perdonen nunca. Igual es marcarlos para toda su vida escolar.
Fíjate tú que tienes toda la razón... ¿Qué extraña maldición persigue a los sugus amarilos y naranjas, que no los quiere nadie? Y no sólo es eso, es que el caso se extiende a otra golosina: las "perlas" de caramelo que venden en Frutos Secos "El Rincón". No sñé si las conoces, tienen forma como de grajeas grandes y son de colores blanco, azul, rojo, amarillo y naranja. Pues pr alguna razón (probablemente la misma que se da en el caso de los sugus) estas dos últimas no le gustan a nadie. Y a mí me fastidia mucho echarme una paletada a la bolsa y comprobar que han entrado muchas más amarillas y naranjas que de las otras... La verdad es que acabo eligiendo sólo las otras tres...
ResponderEliminarMisterios de la vida...
Pues si Enrique, es uno de esos misterios de la vida acongojantes. Yo creo que lo mejor es darle la independencia a las chuches y que se agrupen en microsociedades autocráticas, por color, y sin mestizajes que manchen las bolsas. No es tan dificil ¿no?
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