(...) No puedo elegir, me quedo aquí,
entre olas verdes y montañas azules

(Kirmen Uribe)

domingo, 30 de agosto de 2009

Complejo de croqueta


Después de unos cuantos días durmiendo poco y mal, esta última noche no ha sido una excepción. He dado tantas vueltas en la cama que ya tengo complejo de rollito de primavera. Hoy era un día estupendo para dormir hasta las tantas, sin hora, sin ninguna prisa...y a las siete ya estaba con los ojos como platos. ¡Con lo que he sido yo!.

He abierto la ventana y entraba un fresquito ideal para enroscarse en el edredón y volverse a la cama. Pues venga...Y hasta las nueve haciendo la croqueta, de izquerda a derecha y de derecha a izquierda sin pegar ojo. Tenía calor, me destapaba, tenía frío, me tapaba, tenía sueño, no me dormía, miraba la hora cada cinco minutos, o cada dos, y muy a mi pesar, y sin ninguna obligación, me he levantado a las nueve, muerta de sueño. Con todo el día por delante. Bueno, ya dormiré la siesta, he pensado, hoy puedo hacerlo.

He salido de casa nada más levantarme a dar un paseito. Lo bueno de los domingos por la mañana es que hay poca gente por la calle. Tengo la suerte que aladito de casa hay una zona estupenda, el Ebro. He caminado por la ribera, que está preciosa, casí sin cruzarme con nadie, solo unos remeros en el río, algún pescador solitario y un par de corredores. Sombrita, pajaritos, el agua fluyendo, vamos, un locus amoenus como Dios manda. Allí me hubiera tumbado a la sombra de un arbolito a dormir.Faltaban los pastorcillos.

Me ha sentado tan bien el paseo que al llegar a casa me he quedado dormida en el sofá, media horita que me ha dejado nueva.

Pero sospecho que esta noche voy a volver al rollito primavera, o a la croqueta, lo mismo me da.

jueves, 27 de agosto de 2009

Silencio


En la búsqueda de respuestas, cuando ni siquiera me atrevo a preguntar, el silencio me dice mucho más que las palabras, que no terminan de salir.

Escucho lo que nunca se dice, lo interpreto. Escucho los ojos que me rodean, y vuelvo a interpretar. Sería más fácil preguntar. Sería más fácil hablar.

Pero no. Termino haciendo suposiciones, conjeturas...vamos, me monto películas con diferentes argumentos y con diferentes finales, los que me gustan y los que no.

Con lo fácil que sería preguntar que va a pasar. Pero es mucho más emocionante ver la película en silencio, para no perder detalle...¿y si quisiera ser actriz?. Tambien podría hablar sin palabras, sólo necesitaria espectadores que supieran escuchar el silencio. O interpretarlo. O escuchar las miradas, que son más claras que las palabras. Mucho más.

martes, 25 de agosto de 2009

El eterno retorno


- Venga, cuelga.


- Cuelga tú.


- No, cuelga tú.


- No, cuelga tú


- Nooo, cuelga tú.


- Que no, tonto, cuelga tú.


- Cuelgo, si cuelgas tú.


- No, yo cuelgo si cuelgas tú.


- Tú primero.


- No, primero tú.




-Venga, cuelga....(se repite de nuevo todo el ciclo entre diez o doce veces)



Y por fin, cuando cuelgan, a los dos les arde la oreja derecha. A ella le duele el cuello por sujetar el teléfono con la cabeza ladeada mientras dibujaba tres mil corazoncitos en un bloc. Él tiene la sensación de que se ha olvidado decirle algo importante....-¡Joder, se me ha olvidado decirle que han adelantado dos horas el exámen de mañana!.


Vuelve a llamarla.


-Hola


-Hola


-¿que haces?


-Nada, ¿y tú?


-Nada.


-Ya, pues como yo


-¿En qué piensas?


-En nada, ¿y tú?


- En nada tampoco...bueno en que te quiero un montón.


-Y yo a tí también.


- Ya, pero yo te quiero más.


- No, yo te quiero más


- No, yo te quiero muchísimo más...oye, que va a venir mi madre, cuelga ya,


- No cuelga tú.


-Nooo, jolín, cuelga tú....


domingo, 23 de agosto de 2009

Asuntos pendientes


Cuando está a punto de llegar Septiembre y la tele nos bombardea con cursos a distancia, colecciones y manualidades por fascículos, me da por pensar en las cosas que me gustaría hacer a mí. No este curso, que eso ya lo tengo medio organizado. Me refiero a cosas que me gustaría hacer algún día, antes de que me llegue la hora de criar malvas.

Estas son algunas de esas cosillas. Sin orden de preferencia:

1- Hacer el Camino de Santiago. Hacerlo sola me parece que sería una buenísima experencia. Todo se verá.

2- Escribir un libro. Y publicarlo, claro.

3- Pasar unos días en un hotel-spa de superlujo en el que no te tienes que preocupar de nada más que de ir a las sesiones de taichi, a los masajitos, a los hidromasajes...y de dormir bien.

4- Conocer los Fiordos Noruegos.

5- Asistir a un concierto en la Ópera de Viena.

6- Aprender a esquiar. Bien. Porque hasta la cuña llego, pero poco más. Para poder salir de las pistas de principiantes...

7- Hacer un curso de Cata de vinos. Y aprender de verdad.

8- Viajar a Escocia.

9- Volver a Paris, a pasear por St. Germaine y por la Isla de San Luis.

10- Cancelar la hipoteca...algún día.


Estos diez "me gustaría" se resumen en dos: que me toque una Euromillones o que empiece por el punto 2 y de un pelotazo tipo Harry Potter o Millenium...pero soy consciente de que hay que tener un plan B, por si estos dos no salen.
Me pongo a ello. Todo llega.

lunes, 17 de agosto de 2009

La noche que cambió todo


El once de agosto parecía un día normal. Hice las cosas que hacía todos los días y nada me hacía sospechar que estaba apunto de empezar mi pesadilla. Todo empezó por la noche, después de cenar. En casa reinaba la calma y yo junto a la ventana del mirador me disponia a disfrutar de mi momento, de ese ratito sólo mío, bueno y de mi portatil.



Pero esa noche fué distinta. Ya no había conexión a internet. Había desaparecido. Busqué, actualicé la lista de redes, intenté conectarme a otras...todo inutil. Nunca más la recuperé. El resto de las vacaciones ha sido un "sobrevivir sin conexión", sin mi blog, sin mi correo, sin mi facebook. Los días pasaban, y pensaba en las entradas que me estaba perdiendo, en las que yo no podía publicar, vamos, un sinvivir.



Dias antes, J.M. Ridao ya escribó sobre sufrimientos parecidos aquí, y yo pense: Qué faena no poder conectarte cuando quieres. Pues toma. Una semanita de privaciones.


Mis vacaciones terminan en unas horitas, ya estoy de vuelta en casa y mi conexión de siempre funcionando, para que mi alma bloguera encuentre la paz que había perdido.


lunes, 10 de agosto de 2009

Ójala fuera mío


Pero no lo es. Es un texto de Jorge Bucay que he encontrado en Cuentos para pensar, y que me ha gustado tanto, que lo traigo a mi blog, lo tomo prestado y lo cuelgo aquí, para tenerlo a mano. Ya me gustaría que fuera mío.


Quiero que me oigas sin juzgarme

Quiero que opines sin aconsejarme

Quiero que confies en mí sin exigirme

Quiero que me ayudes sin intentar decidir por mí

Quiero que me cuides sin anularme

Quiero que me mires sin proyectar tus cosas en mí

Quiero que me abraces sin asfixiarme

Quiero que me animes sin empujarme

Quiero que me sostengas sin hacerte cargo de mí

Quiero que me protejas sin mentiras

Quiero que te acerques sin invadirme

Quiero que conozcas las cosas mías que más te disgusten

Que las aceptes y no pretendas cambiarlas

Quiero que sepas...que hoy puedes contar conmigo...

Sin condiciones.


Y sigo citando a Jorge Bucay: "Los cuentos son para dormir a los niños y para despertar a los adultos"

sábado, 8 de agosto de 2009

Tiempo favorable


El tiempo que tardo en tender una colada, es lo que tardo en elaborar, una vez más, una teoría razonable. Una explicación de por qué las cosas son como son, y por qué deben ser así.

Las sábanas delante y los calcetines detrás. Cada cosa tiene su lugar. Cada uno elige dónde quiere estar, aunque implique renunciar a muchas otras cosas que harian el camino más fácil.

Se nubla un poco, espero que no llueva, si aguanta así, con el aire que hace la ropa estará seca enseguida. Todo es cuestión de tiempo. No se si hago lo correcto. Creo que sí, pero ahora todo lo que es y lo que va a ser se agita en mi cabeza, sin forma concreta, como una promesa de orden, de lo que puede llegar ser y de lo que no quiero que sea.

Con las últimas camisas que cuelgo el sol termina de salir débilmente. Suficiente para que el cielo deje de amenazar agua. Al final voy a tener suerte, la mañana está fresca y se barruntaba la tormenta.

El ruido de un pinza al desplomarse contra el suelo, como tantas otras veces, me hace sentir el golpe dentro, como algo que se quiebra...solo es una pinza. He perdido muchas.

En un rato la ropa estará seca. Tengo que acordarme de comprar pinzas. Ya quedan pocas.

En total unos cinco minutos. Más no he tardado. Cinco minutos dan para mucho.

viernes, 7 de agosto de 2009

El tarrito de cristal


-¿Qué tal? ¿Cómo vamos de güisqui?, ha preguntado una de las señoras, que hacía unos instantes se descoyuntaba bailando los temas de Abba que tocaba la charanga de la peña.

Ha cenado en una mesa cerca de la nuestra, con su cuadrilla de amigas, todas señoras respetables, pero un pelín desatadas. Se entiende el desmadre siendo el último día de fiestas.

- Si a vosotros os falta, yo os doy, que llevo, os lo cambio por eso, ha dicho señalando unos trozos de tarta que quedaban en nuestra mesa. Y mientras decía esto ha abierto su bolsito de bandolera y ha sacado un tarrito de cristal con su tapa de rosca blanquito y lo ha puesto encima de la mesa. Los allí presentes hubieramos jurado que era una muestra de orina.

- Oyes, que es del bueno ¿eh?, que es JB, y desenroscando la tapa del frasquito que debía haber sido de puntas de espárrago antes de convertirse en "petaca casera" nos ha dado a oler.

Mi primo ha confirmado que era JB...

- No se preocupe, que de güisqui andamos bién, ande,tome un trozo de tarta.

Y la señora ha vuelto a poner la tapa del tarrito, le ha pasado un pañuelito de algodón alrededor para dejarlo limpito y se lo ha vuelto a meter al bolso, que la noche era joven. Las de su cuadrilla se han acercado como moscas a la miel a por su porción de tarta y se han ido tan contentas...a quemar Estella, con una media de sesenta años.

Y yo con treinta y siete me he venido para casa, deseando pillar la cama y que acaben las fiestas de una vez.

Estoy segura de que alguna de ellas llevaba en el bolso un tupperware con pacharán.


Mañana a la mañana hay mercado en la plaza. Alguna andará por allí buscando conservas, vete a saber con qué intenciones...

miércoles, 5 de agosto de 2009

Mi playa


Ya hacia mucho que no me sentaba en mi playa. Ha hecho un día espléndido, pero mi playa está bonita siempre; la lluvia también le sienta bien.

El horizonte era hoy azul infinito y mirándolo no se cuanto tiempo habré pasado, pero no me cansaba. Lo miraba buscando respuestas, mirando hacia fuera y mirando hacia dentro.

El mar que en el horizonte se veía quieto y en calma, en la playa estaba inquieto, revoltoso, inconformista, como siempre lo recuerdo.

El sonido de las olas rompiendo ha sido como una nana que escuchaba con los ojos cerrados mientras la brisa acariciaba mi piel y mis pies jugueteaban bajo la arena, escondiéndose, buscando el fresquito.

Esta playa ya es parte de mí. Nunca me defrauda. No necesito hacer nada especial cuando estoy allí. Si abro los ojos no me canso de mirar los azules en todas sus variedades, tan serenos, tan amigables. Si cierro los ojos no me canso de escuchar el rumor del mar, una y otra vez, siempre igual y cada vez tan especial.

Es un sitio estupendo para pensar, para recordar, para añorar y para soñar.

Lo visto, lo oido y lo sentido me lo llevo conmigo, como en una postal viva y durante el año, cuando lo necesite la miraré y será como estar allí, sintiendo la brisa.

domingo, 2 de agosto de 2009

Carlos y Diego

Hace unos días me entristeció ver las imágenes de la casa cuartel de la Guardia Civil de Burgos. Me estremeció porque recordé lo sucedido en Zaragoza.
Más de cincuenta niños dormian allí y siguen en este mundo porque Dios lo ha querido.
Carlos y Diego no tuvieron la misma suerte y hace unos dias fueron asesinados en nombre de ¿Euskalherria? ¿La autodeterminación? ¿La libertad del pueblo vasco...?
Por primera vez un Lehendakari ha salido de "su territorio" y ha viajado al "Estado español", al lugar dónde se ha producido el atentado y ha lanzado un mensaje claro a los terroristas.
No se lo que durará este Lehendakari. Si pudieran se lo cargaban ya mismo. Está demostrando que se puede ser muy vasco y nada hijo de puta a la vez. No es santo de mi devoción pero está demostrando que los tiene bien puestos, y eso allí ya es mucho.
Miro las fotos de Carlos y Diego y siento una pena inmensa. Me pregunto por sus familiares, sus amigos y sus compañeros. Qué duro perder a alguien querido de ese modo.
Miro sus fotos, el uniforme que visten y sus miradas y me transmiten fuerza para seguir aquí, diciendo alto y claro que nunca vamos a ceder, que los asesinos no tienen sitio, que mi pais, España, no se va a doblegar nunca ante el terror, que seguimos recordando a los que nos han sido arrancados y que por ellos y por la libertad, no hay nada que tratar con esa gentuza.
A por ellos. Sin tregua.

sábado, 1 de agosto de 2009

Julio


Termina el primer día de Agosto, y todavía me pesa Julio. Treinta y un días en los que ha habido de todo. Es el mes en el que menos he escrito porque han sido demasiadas cosas que mascar, demasiadas ideas, demasiadas decisiones que tomar. Y por las noches, que es cuando me pongo delante del ordenador notaba que mi cerebro se quedaba en pausa. No me daba más de sí.

En Julio he cumplido años, treinta y siete. Toda una vida ya, pero también toda una vida por delante.

También me he despedido de gente muy querida para mí, he tomado decisiones que una prefiriría no tener que tomar nunca y he asimilado noticias inesperadas.

No ha sido un mes fácil Julio, pero ya desde Agosto, recuerdo también algunos pequeños instantes de magia que he vivido y que me hacen esbozar una sonrisa.

Me quedo con esos instantes mágicos y con la fuerza que me dan para afrontar el futuro.