En la búsqueda de respuestas, cuando ni siquiera me atrevo a preguntar, el silencio me dice mucho más que las palabras, que no terminan de salir.
Escucho lo que nunca se dice, lo interpreto. Escucho los ojos que me rodean, y vuelvo a interpretar. Sería más fácil preguntar. Sería más fácil hablar.
Pero no. Termino haciendo suposiciones, conjeturas...vamos, me monto películas con diferentes argumentos y con diferentes finales, los que me gustan y los que no.
Con lo fácil que sería preguntar que va a pasar. Pero es mucho más emocionante ver la película en silencio, para no perder detalle...¿y si quisiera ser actriz?. Tambien podría hablar sin palabras, sólo necesitaria espectadores que supieran escuchar el silencio. O interpretarlo. O escuchar las miradas, que son más claras que las palabras. Mucho más.
Hola Maite.
ResponderEliminarBonitos pensamientos y curiosas preguntas.
Y besos...
Bueno, a veces las miradas engañan. Y mucho.
ResponderEliminarLas palabras son más claras, aunque hay que tener cuidado con lo que se dice.
Un abrazo en silencio.
Uff Maite, yo prefiero preguntar, aunque reconozco que a veces es difícil que te respondan.
ResponderEliminarUn abrazo
En mi opinión, el silencio es un lenguaje mucho más rico que otros. A la altura de la música y la poesía.
ResponderEliminarAbrazos.
Pues con todo el respeto del mundo hacia quienes opinan lo contrario, a mí me parece que la frase "El grito más grande es el Silencio" es sólo un tópico tontorrón. Creo que sobrevaloramos el Silencio, y no es para menos. En un mundo de gritos, estridencias, pitidos y motores de coche, música a volumen infernal y bullicio insoportable, es lógico que busquemos el silencio... Es un bálsamo para la vorágine de la vida moderna, la prisa, los nervios, el estrés...
ResponderEliminarPero el silencio pleno, el silencio absoluto, asusta. Y mucho. Yo siempre lo he asociado con la Muerte. Un lugar absolutamente silencioso es un cementerio, un lugar muerto, desesperanzado, inquietantemente amenazador. Yo prefiero sustituírlo por sonidos como la risa de un niño, el soplar del viento entre las ramas de un árbol, una música suave, el canto de un pájaro, el murmullo de un arroyo, e incluso el grito de una madre llamando a su hijo en un parque para marchar a su casa. Señales de vida, señales de tranquilidad, señales de calma que nos recuerdan que en la vida no sólo hay ruido sino también sonidos...
¿El silencio? El silencio es la Muerte. La Gran Silenciosa...
Os lo regalo...
¿Os habéis parado a pensar alguna vez en esta escena? Una reunión o debate en el cual los contertulios han perdido las maneras y están todos gritando.El moderador es incapaz de poner orden y todo se desmadrá... ¿quién es la persona que más destaca de todo ese grupo? La que se queda atónita y en silencio viendo todo ese espectáculo con la boca abierta. ¿por algo será no?
ResponderEliminarHola Isis,
ResponderEliminarme alegra mucho tenerte de nuevo aquí.
Muchas gracias y un beso.
Un abrazo en silencio es lo mejor del mundo.
ResponderEliminarClaro que una mirada puede engañar, igual que una palabra.
La mejor comunicación, la combinación de ambas cosas, pero las miradas, Javier, para mí son requeteimportantes.
Capitán ¿y si no puedes o no quieres preguntar?.Preguntar es el camino más rápido, está claro, pero no el único.
ResponderEliminarUn abrazo
Jose Miguel, totalmente de acuerdo. a eso me refería. Nada más que añadir. Me quedo en silencio.
ResponderEliminarUn beso.
Ay, Enrique, el silencio para siempre es malo, claro, pero como tú dices, para mí a veces es un bálsamo que necesito. Incluso si se sabe manejar o "escuchar", es una manera más de comunicarse, existen gestos, miradas...
ResponderEliminarJavi, a lo mejor es porque no le dejan hablar, que si pudiera....jaja.
ResponderEliminarUn beso
Hermoso pensamiento, me identifique con el texto, me pasa muy a menudo.
ResponderEliminarSaludos!
Gracias JoaqoOo, al final, cuando contamos lo que pensamos, nos damos cuenta de no son cosas tan extrañas ¿no?,
ResponderEliminarGracias por tu visita y bienvenido.