(...) No puedo elegir, me quedo aquí,
entre olas verdes y montañas azules

(Kirmen Uribe)

domingo, 22 de agosto de 2010

Especie protegida



No puedo evitar ver estos paisajes y quedarme con cara de haba. No me acostumbro nunca a semejante derroche de todo; de luz, de montañas, de agua, de verde, de piedras. Me parece que estoy dentro de una postal...hasta que empiezo a subir y entonces en un momento dado empiezo a echar los higadillos, y me empieza a escocer la cara, aunque llevo protección 50...lo normal cuando uno se va al monte. A pesar de todo, me sigue pareciendo una postal, hasta que hace su aparición el "macho Alfa". Siempre termina apareciendo, y casi nunca va solo.
El macho Alfa siempre va con muchísima prisa, al menos en el tramo en el que coincide con un grupo formado exclusivamente por hembras Beta. Cuando pasan junto al grupo de hembras adelantan por enmedio con el gesto muy grave, muy concentrados y con aire de "chicas, dejad esto a los profesionales". Parece ser que tienen alguna misión especial, cuando en realidad, van al mismo sitio que las pobres hembras Beta, y por el mismo camino.
Normalmente son los más chulitos de la montaña, y si se dirigen al grupo de hembras es para dar algún consejo que nadie les ha pedido del tipo: "¿Llevais el material adecuado?, que ese tramo es muy complicado" o ¿Vais a subir por ahí?, mira que está muy mojado y os vais a resbalar..." y todo en ese plan.
Afortunadamente el encuentro con el macho Alfa es más bien breve porque es su deber demostrar que es "CITIUS, ALTIUS, FORTIUS" y por ello, al mismo tiempo que te da esos consejos que nadie le ha pedido, aprieta el paso y se empieza a ver allá a lo lejos, cada vez más pequeño..."ala majo, tanta felicidad encuentres como paz dejas", piensan las hembras Beta.
No hay muchos de éstos, la mayoría de la gente es normal, pero el macho Alfa no puede disimularlo. A veces sucede que un grupo de dos o tres está integrado al 100% por machos Alfa y entonces cuando pasan a tu lado es como si te arrolla un tren, un alud debe ser algo parecido a ésto. Y el colmo es cuando coinciden dos grupos de machos Alfa distintos en el camino. Ahí más vale retirarse a un lado, parar a hacer fotos hasta que pasen, o aprovechar para ponerse crema, beber agua, comerse una nuez o cualquier cosa para ganar tiempo y espacio, sobre todo.
Hoy hemos visto algunos. Hay más machos Alfa que sarrios. Creo que ambas son especies protegidas del Pirineo...aunque la semana pasada por la llanura Castellana también andaba alguno suelto.

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