(...) No puedo elegir, me quedo aquí,
entre olas verdes y montañas azules

(Kirmen Uribe)

martes, 28 de septiembre de 2010

Rebeldes con causa


Siempre digo que me gusta lo que hago, entre otras cosas por la cantidad de temas diferentes en los que me veo envuelta; por la sensación de estar siempre construyendo (o reconstruyendo) algo. Pero entre todo lo que ocupa mi tiempo hay una cosa que me parece verdaderamente apasionante y que me llena muchísimo, que es hacer que los demás se cuestionen las cosas. Que se pregunten ¿por qué? o ¿por qué no?. Que no den nada por hecho, que piensen por si mismos y que tomen las decisiones sin miedo. Aunque no sean las acertadas en alguna ocasión. A veces pienso que lo que estoy haciendo es formar un ejercito de rebeldes anarquistas, insumisos y contestatarios antisistema. Pero me aburre mucho estar rodeada de gente que dice sí a todo porque es lo correcto.
Cuestionarse la realidad no significa estar en contra de ella, significa cambiar el punto de vista, verla desde otro lugar distinto al mío, ponerle un filtro de otro color, tener en cuenta elementos que la pueden modificar y muchísimas cosas más.Ayudar a desarrollar el pensamiento crítico, y la confianza necesaria para apechugar con las propias decisiones, en la gente que está a mi aldededor es algo que compensa con creces los momentos de tensión de estrés o de carga de trabajo que pueda tener. A veces puede resultar agotador, que tu equipo se cuestione todo. Tiene su parte de riesgo, pero el cuestionamiento provoca cambio, avances, mejoras, movimiento, en fin, un cacao. Pero sin cuestionamiento, sin crítica, sin caos, no hay mejora, ni hay nada. Y al final, todos somos "buscadores" de algo, curiosos y exploradores, como los niños... por naturaleza...y no conviene ir en contra de la naturaleza.

4 comentarios:

  1. Es muy saludable preguntarse por el por qué de las cosas.
    Salu2

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  2. Dyhego, ¿tú crees? ¿Y por qué?.
    Un beso!.

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  3. El miedo que me da a veces de ser "abogado del diablo" es caer en el síndrome de Estocolmo...
    Salu2 ¿pór qué? PORQUE LO VALEMOS...

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  4. El síndrome de Estocolmo...¡me suena, me suena!

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