Las noches ya no me dan más de sí. Ayer por fín encontré Andábata de Olga Bernad, del Blog Caricias perplejas. Llevaba un tiempo buscándolo y dando una vuelta por la feria del libro con Marocha, lo encontramos. Pero además Olga estaba firmando libros en una de las casetas, así que aprovechamos para conocerla "in person". Nos dedicó su libro, conocimos a su marido "el rugbilari", que nos hizo una foto muy chula y dejamos pendiente para otra ocasión la firma de sus "Caricias perplejas", el primer poemario que publicó el año pasado, que se quedó en la mesilla de mi habitación. Estoy deseando empezar a leer su Andábata pero tengo que reprimir esta tendencia mía al caos y hasta que no termine los dos que tengo empezados, no voy a coger este.
Esta noche, después de ver Las montañas de Edurne, me voy a concentrar en mi habitación, como los futbolistas, sin tele, sin música, sin ordenador, sólo con mis libros pendientes, a ver si no me quedo dormida con la luz encendida y el libro tirado por la cama, como me suele pasar. Que si no no avanzamos y se me acumula la tarea...y para rematar, lo del muro, que me quita el sueño cuando más lo tengo.
Gracias, Maite, por incluir esta Andábata en tus lecturas futuribles, ya me contarás;-) Fue un placer conoceros, tanto a ti como a Marocha.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Olga, me estoy terminando uno de Murakami y otro sobre montaña. Ya casi casi están. El siguiente es Andábata. Marocha ya se lo ha leido, le ha encantado pero no ha querido decirme ni mú.Estoy intrigada.
ResponderEliminarEl placer fué nuestro, de verdad.
Besos.