(...) No puedo elegir, me quedo aquí,
entre olas verdes y montañas azules

(Kirmen Uribe)

viernes, 26 de febrero de 2010

El muro

Muralla romana de Caesaraugusta

Para terminar con la semana fantástica de la autoayuda hoy vamos con el capítulo dedicado a "mi muro".

He tenido muchos a lo largo de mi vida. De diferentes alturas, de diferentes materiales. Unos los he ignorado, otros los he derribado , los he saltado, o los he evitado. Pero en este momento estoy frente a EL MURO, así, con mayúsculas.


Si este muro no termina con mi paciencia me va a convertir en la mujer más paciente de la galaxia...estoy al borde la la meditación trascendental, o del ataque de nervios, dependiendo del día. Si lo que hay tras ese muro me diera igual, no me complicaría tanto la vida, pero me importa demasiado como para dejarlo pasar.


Cada vez que estoy frente a "mi muro", o pienso en él, entiendo perfectamente el sentido de esa frase de Randy Paush: "los muros están para mostrarnos lo mucho que deseamos algo".


Mi muro es de piedra sólida, sólida, de cimientos profundos y de paredes altas. Un señor muro. Un muro que parece muy de aquí, de Aragón, cabezón, cabezón...Una aragonesa frente a un muro...no sé cómo puede acabar esto.

14 comentarios:

  1. Pues por muy aragonesa que seas, yo creo que si le pegas un cabezazo aragones, ni se inmuta...o sea...que "ignoralo" directamente. ¡Si sólo es una piedra y gorda¡

    Buen fin de semana. Un beso

    ResponderEliminar
  2. Mariángeles, con un muro así los cabezazos están descartados, no sirven para nada, no te preocupes, la estrategia tiene que ser otra.
    Besos, y buen finde también para tí.

    ResponderEliminar
  3. maite estoy contigo,los cabezazos no van a ningún lado..mejor utilizar la cabeza pero de otra manera: con reflexión y análisis ambos configuran la mejor estrategia a seguir para acabar con ese muro..
    Un beso

    ResponderEliminar
  4. Isa, qué facilico parece así planteado ¿verdad?.
    Pues venga, paso a paso.
    Besos.

    ResponderEliminar
  5. Con una aragonesa en frente, no dudo del resultado

    Un beso

    ResponderEliminar
  6. Capitán, un nuevo Sitio de Zaragoza va a ser esto.
    Besos.

    ResponderEliminar
  7. Acabará bien, mientras no intentes derribarlo a cabezazos. Un abrazo, Maite.

    ResponderEliminar
  8. Mejor con miel que con hiel. Deja la cabeza tranquilica, no vaya a ser que luego la fueses a utilizar para algo y te la encuentres inservible. Y un poco de valium 15 te regalará un poco de paciencia, por si te toca esperar a que caiga.

    Besos relajantes.

    ResponderEliminar
  9. Mucha fé teneis en mí el Capitán y tú, Jose Miguel. Por convicción propia y por votación popular, le técnica del cabezazo ha quedado definitivamente eliminada.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  10. Lo de la miel, estamos de acuerdo, lo de la cabeza tranquilica, no puede ser, sabes que soy una ansiosa, y lo del Valium, eliminado también. Aquí de automedicarse, nada de nada. Aguantamos a pelo.
    Ala. Besos ansiosos.

    ResponderEliminar
  11. Maite, con tu permiso, sabiendo lo poco que te conozco, pero siento que tu puedes con ese muro, y con cualquiera que se levante ante tus ojos...

    un saludo de corales

    glup!

    ResponderEliminar
  12. MAITE:
    ¿Pero si sabes escalar cumbres se te va a resistir un muro?
    Salu2

    ResponderEliminar
  13. Pez payaso, así da gusto. Me alegra que andes por aquí.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  14. Dyhego, que no es lo mismo, hazme caso.
    Besos.

    ResponderEliminar