Me gusta este poema de Mario Benedetti. Y lo traigo aquí por vagancia. Vamos que lo leo y es como si dijera lo que quiero decir yo, así que hoy no me esfuerzo, ni me rompo la cabeza.
Hoy habla Benedetti y yo corroboro.
Un día reflexivo, pero muy poco creativo.
Estados de ánimo
Aveces me siento
como pobre colina
y otras como montaña
de cumbres repetidas.
Unas veces me siento
como un acantilado
y en otras como un cielo
azul pero lejano.
A veces uno es
manantial entre rocas
y otras veces un árbol
con las últimas hojas.
Pero hoy me siento apenas
como laguna insomne
con un embarcadero
ya sin embarcaciones
una laguna verde
inmóvil y paciente
conforme con sus algas
sus musgos y sus peces,
sereno en mi confianza
confiando en que una tarde
te acerques y te mires,
te mires al mirarme.
como pobre colina
y otras como montaña
de cumbres repetidas.
Unas veces me siento
como un acantilado
y en otras como un cielo
azul pero lejano.
A veces uno es
manantial entre rocas
y otras veces un árbol
con las últimas hojas.
Pero hoy me siento apenas
como laguna insomne
con un embarcadero
ya sin embarcaciones
una laguna verde
inmóvil y paciente
conforme con sus algas
sus musgos y sus peces,
sereno en mi confianza
confiando en que una tarde
te acerques y te mires,
te mires al mirarme.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarEl conforme de un disconforme
ResponderEliminarUn abrazo
Espero que te sientes bien, Maite.
ResponderEliminarUn abrazo
Maite, mi mayor abrazo y mi mejor poema.
ResponderEliminarPues eso, Capitán. Per es sólo un estado de ánimo, que igual que viene se va.
ResponderEliminarUn beso
Dyhego,gracias. Todo bien.
ResponderEliminarUn beso.
Gracias Javier, seguro que tu mejor poema me gusta más que el de Benedetti.
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