No puedo controlarlo todo. Llevo una teporada repitiéndome esta frase, como un mantra. Ahí está, como una gotera, y de repente me encuentro con otra frasecita que consigue lo que no ha conseguido la gotera.
Sin ser lo que buscaba terminaste siendo todo lo que necesito
Me caigo del caballo, como San Pablo, y recuerdo algo que siempre he tenido muy claro...no hay que esperar que la gente cambie..., pero...¿y yo?....No puedo controlarlo todo, y no puedo controlar lo que siento, aunque me empeñe todos los días. La gente no cambia...¿Por qué tengo que cambiar yo?. Esto es lo que hay. Me gusta lo que siento. De momento, se queda ahí.Me he dado autorización para sentir sin analizar y emocionarme sin entender. Carta blanca...y a fluir. No quiero controlarlo todo.
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¡Hola Maite! Hay sentimientos que no son racionales... y son los que vivimos mas intensamente. Gracias por volver a escribir. ¡Un abrazo!
ResponderEliminarMaite:
ResponderEliminar¡Qué alegrón verte (leerte) de nuevo!
Creo que más que cambiar, es bueno pulirse algunos defectillos.
De todos modos, la vida nos va cambiando lentamente, sin que nos demos cuenta. Vamos. Creo yo. No sé...
Salu2 alegres.
Hola Isa!!
ResponderEliminarme alegro de saber de tí.
Hija, tienes toda la razón.
Besos!!
Dyhego, el alegrón me lo pego yo al ver que sigues aquí, como siempre.
ResponderEliminarMil gracias!!